Ya están redactados los informes de los resultados de las campañas de anillamiento científico de aves de 2020, y estos ya están disponibles en la web del proyecto. Estos trabajos se enmarcan dentro de la Acción D2 del proyecto LIFE Paludicola, denominada “Seguimiento de las poblaciones de carricerín cejudo y especies asociadas”.
El objetivo de esta acción es realizar censos anuales de las poblaciones migratorias del carricerín cejudo y de otras especies palustres en los nueve humedales donde se desarrolla el proyecto. Los trabajos de anillamiento científico en 2020 se han desarrollado durante el paso prenupcial (abril) en tres humedales litorales de trabajo del LIFE Paludicola en la Comunidad Valenciana: marjal del Moro, La Albufera y marjal de Pego-Oliva; y durante la migración posnupcial (julio, agosto y septiembre) en los dos humedales de Castilla-La Mancha: lagunas de Manjavacas y Chica de Villafranca, y en los tres de Tierra de Campos en Castilla y León: lagunas de La Nava, Boada y Pedraza de Campos.
Estos seguimientos pretenden aumentar el conocimiento de la migración del carricerín cejudo en los humedales ibéricos, conseguir datos sobre sus parámetros migratorios y sedimentación, ampliar y caracterizar el conocimiento de su fenología migratoria, caracterizar y analizar los parámetros biométricos, establecer unos indicadores e incrementar el conocimiento de la comunidad de aves. Además, permiten testar las acciones de conservación que se están desarrollando desde el inicio del proyecto LIFE, lo que permiten actualizar recomendaciones de gestión y propuestas de conservación de los humedales.
En la Comunidad Valenciana se realizaron un total 9 capturas de la especie objetivo, el carricerín cejudo. Cabe destacar que la estación de anillamiento del Prat de Cabanes-Torreblanca no estuvo operativa en 2020, con lo que las capturas se repartieron entre las otras tres: 3 en el marjal del Moro, 4 en el tancat de la Ratlla (La Albufera) y 2 en el marjal de Pego-Oliva. De toda la comunidad de aves se realizaron un total de 887 capturas de 45 especies incluidas en 19 familias de la Clase Aves, de las cuales 869 son primeras capturas (anillamientos y controles). Entre ellas destacaron por su abundancia el carricero común y el mosquitero musical; y por su estatus de conservación a nivel europeo el carricerín cejudo, la canastera común y el carricerín real; a nivel nacional el colirrojo real; y a nivel autonómico la canastera común, el avión zapador y el colirrojo real de nuevo.
En Castilla y León se realizaron un total de 37 capturas de la especie objetivo, el carricerín cejudo, de ellas 25 primeras capturas repartidas en tres estaciones: 29 en La Nava-Cantarranas; 5 en la laguna de Boada, 3 en La Nava-La Colada y 0 en la laguna de Pedraza. Respecto al global e la comunidad de aves, se realizaron un total de 3.266 capturas de 47 especies incluidas en 25 familias de la Clase Aves, de las cuales 2.926 son anillamientos o primeras capturas. Entre ellas destacaron por su abundancia el carricero común, la lavandera boyera, el mosquitero musical, el carricerín común, la buscarla unicolor y el papamoscas cerrojillo; y por su estatus de conservación a nivel europeo el carricerín cejudo, el martín pescador común, el ruiseñor pechiazul y el colirrojo real, y nacional el colirrojo real nuevamente. En los humedales castellano-leoneses cabe destacar que, al igual que ocurrió en la campaña de 2019, el porcentaje de juveniles de carricerín cejudo capturados fue notablemente inferior al de los datos históricos, representando tan solo el 26% de los ejemplares capturados.
En Castilla-La Mancha se realizó una captura de la especie objetivo, el carricerín cejudo. Esta fue en la estación de la laguna de Manjavacas, mientras que en la estación de la laguna Chica de Villafranca hubo 0 capturas de esta especie. Respecto al global e la comunidad de aves, se realizaron un total de 662 capturas de 20 especies incluidas en 12 familias de la Clase Aves, de las cuales 618 son anillamientos o primeras capturas. Entre ellas destacaron por su abundancia el carricero común, la buscarla unicolor y la golondrina común; y por su estatus de conservación a nivel europeo el carricerín cejudo, el carricerín real y el ruiseñor pechiazul, y regional el bigotudo, el carricerín real y el ruiseñor pechiazul nuevamente.
Se pueden descargar los informes completos en el siguiente enlace, así como a otros documentos técnicos producto de las acciones del LIFE Paludicola.